¿Estás buscando un viaje otoñal a Italia que le deleite la vista, el alma y el paladar? ¿Quizá algún lugar fuera de lo común con mucha historia, cultura e historias inspiradoras? Dos destinos italiano ideales para el otoño son Arezzo, en la Toscana, y Asís, en Umbría. Estas ciudades se encuentran en dos regiones diferentes, pero a sólo unos 100 km de distancia la una de la otra (90 minutos en coche), lo que significa que puede combinarlas en un itinerario de 7 a 10 días para aprovechar al máximo la experiencia.
¿Por qué son únicos estos destinos italianos? Averigüémos!
Visita Arezzo y las joyas del Valle del Casentino
Arezzo es una elegante ciudad enclavada en el valle toscano del Casentino.
Si te gusta el arte, podrás admirar los magníficos ciclos de frescos del artista renacentista Piero della Francesca en la Basílica de San Francisco. Titulados «Leyenda de la Vera Cruz», fueron terminados entre 1452 y 1466. La zona que rodea Arezzo era conocida como Terre di Piero (las tierras de Piero) en honor a este artista, que nació aquí y revolucionó la perspectiva en la pintura. El arquitecto, historiador y pintor Giorgio Vasari también nació en Arezzo, donde se puede visitar la Casa-Museo Vasari.
Si te gusta el cine, seguro que has visto la película ganadora de un Oscar «La vida es bella», de Roberto Benigni (1997). Se rodó en Arezzo, ¡y puedes explorar la ciudad a través de las localizaciones de la película!
Uno de los lugares más destacados cerca de Arezzo es el Castello dei Conti Guidi (o Castello di Poppi), un castillo medieval que perteneció a la noble familia Guidi. Se dice que el Poeta Dante Alighieri, encontró hospitalidad en este castillo durante su exilio, y aquí escribió el Canto XXX del Infierno.
El santuario de La Verna es otro lugar inspirador que visitar cerca de Arezzo. Encaramado en el Monte Penna, con vistas a una escarpada caída sobre el valle, está rodeado por un monumental bosque de abetos y hayas. Dante escribió admiraciones sobre este lugar en Paradiso XI. Este santuario franciscano es donde San Francisco de Asís recibió los estigmas a finales del verano de 1224.
Explorar Asís y la naturaleza circundante
Hablando de San Francisco, la villa medieval de Asís es famosa por ser su lugar de nacimiento y muerte. Fue el fundador de la Orden de los Frailes Menores y líder del movimiento de pobreza evangélica a principios del siglo XIII. Pero la ciudad tiene mucho que ofrecer aparte del punto de vista religioso y espiritual.
Los amantes del arte en Asís –Patrimonio Mundial de la UNESCO– no pueden perderse obras de artistas influyentes, como las Historias de San Martín de Simone Martini, la Capilla de la Magdalena de Giotto y la Crucifixión de Cimabue. Asís no sólo es una de las ciudades medievales mejor conservadas del mundo, sino que en sus alrededores podrás visitar algunas de las joyas más bellas de Italia. Por ejemplo, los idílicos pueblos de Montefalco, Spello, Bevagna y Foligno.
Si eres un amante de la naturaleza, puedes explorar los numerosos senderos de Asís a pie, en bicicleta o a caballo. También hay diferentes maravillas naturales en el territorio circundante. No dejes de visitar las Fonti del Clitunno, un lugar mágico donde las aguas de manantiales subterráneos generan un pequeño lago de colores únicos y variada flora y fauna.
Toda esta zona -como toda la región de Umbría- es un paraíso gastronómico y vinícola. El otoño es la estación perfecta para probar las trufas locales, las setas, la espelta, las castañas y el azafrán, ¡y degustar el famoso vino Sagrantino di Montefalco!
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Fotos de Pixabay por: Alan Frijns El_en_a sebastiano iervolino fausto manasse alefolsom
